Soborno: Principios básicos
¿Qué es el soborno? Un soborno puede ser cualquier tipo de beneficio. Puede ser un pago en efectivo, o puede adoptar la forma de obsequio, entretenimiento, pago de matrícula escolar, apoyo de afiliación a un club, donación a un partido político o institución de beneficencia, pago de vacaciones, o promesa de empleo futuro.
¿Cuándo se produce el soborno? En general, una persona comete un delito de soborno cuando (sea directamente o a través de otra persona o empresa) ofrece, da, pide o recibe un beneficio con la intención o a sabiendas de que el beneficio se usará para inducir a alguien a cometer un acto poco honrado. También se comete un delito de soborno cuando una persona que ocupa un alto cargo sabe o sospecha que se está ofreciendo, pagando, pidiendo o recibiendo un soborno, pero hace la vista gorda y no lo investiga ni hace nada para detenerlo. La definición exacta de soborno dependerá de la jurisdicción en particular.
Ejemplo (1): El jefe de ventas de una empresa ofrece un soborno al responsable de la adjudicación del contrato del cliente para que adjudique el contrato a su empresa. El responsable de contratación se niega a aceptarlo. Aun así, es probable que el jefe de ventas haya cometido un delito de soborno cuando hizo la oferta.
Ejemplo (2): El jefe de ventas de una empresa ofrece un soborno al responsable de la adjudicación del contrato del cliente para que adjudique el contrato a su empresa. El responsable de la adjudicación de contratos lo acepta. Sin embargo, no adjudica el contrato a la empresa. En este caso, el jefe de ventas y el responsable de la adjudicación de contratos pueden ser responsables del soborno aunque no se adjudicase el contrato a la empresa. Ambas partes pueden haber cometido un delito de soborno cuando dieron y aceptaron el soborno.
Ejemplo (3): El responsable de la adjudicación del contrato del cliente pide un soborno al jefe de ventas de una empresa y le dice que a cambio adjudicará a su empresa. El jefe de ventas se niega a pagar el soborno. En este caso, es posible que el responsable de la adjudicación del contrato sea responsable de soborno aunque de hecho no lo recibiese. El responsable de la adjudicación de contratos puede haber cometido un delito de soborno cuando lo pidió.
Ejemplo (4): Un director de empresa sabe que para que su empresa obtenga un contrato debe pagarse un soborno a un funcionario. Da órdenes al representante de ventas para que se pague el soborno a través de uno de los subcontratistas de la empresa. El representante de ventas lo hace a través del director del subcontratista. Aunque el director de empresa no estuviese directamente implicado en la transacción del soborno, es probable que aun así haya cometido un delito de soborno. Además, también es probable que sean culpables de un delito de soborno el representante de ventas, el director del subcontratista, el subcontratista y el funcionario.
Ejemplo (5): Un director de empresa no ha dado órdenes de pagar un soborno, pero sospecha (con razón) que los agentes de la empresa (que perciben comisiones por obtención de resultados) están pagando sobornos para obtener contratos para la empresa. No hace nada para impedir o investigar el presunto soborno. Es probable que el director de la empresa haya cometido un delito de soborno porque, aunque ocupe un cargo que le faculta para adoptar medidas destinadas a prevenir el soborno, está haciendo la vista gorda. Además, es probable que sean culpables de un delito de soborno la empresa, los agentes y los destinatarios de los sobornos.